Proseguimos acercándole a cada candidato a la alcaldía, mediante una misma entrevista “En la política, tú eres un bien, eres lo único importante” realizada a cada uno de ellos, que iremos publicando por orden alfabético del nombre del partido.
No queremos ir al detalle de las propuestas programáticas, ya que para ello hemos publicado el programa electoral. Queremos ir más a la persona, a su visión de la política y su relación con la sociedad.
Le presentamos a Ana Rosa Mena de Dios, candidata a la Alcaldía del Ayuntamiento de Tegueste por el Partido Socialista Obrero Español.
P. Hoy en día, se mira con sospecha aquellos que dan el salto a presentarse a unas elecciones. A nosotros nos parece un paso valiente y que puede estar movido por un impulso de generosidad. ¿Por qué merece la pena dar este salto que en muchas ocasiones es ingratamente reconocido? ¿Qué inquietudes te mueven?
R. Cuando decides dar este paso no ves las consecuencias, mas tarde vas viendo que el resultado de dedicarte a esto está directamente relacionado con la vida de las personas que te rodean, con tus vecinos, y entonces es cuando te das cuenta de que merece la pena.
P. ¿Qué te sugiere la afirmación “la política es una persona, un miembro de la vecindad, un YO que se pone en movimiento en la búsqueda del bien común”?
R. Al final, todos hacemos política, seas vecina o vecino, seas concejal, alcalde, estudiante…todos caminamos hacia el bien común, es lo correcto.
P. “En el centro de la política debe estar siempre la persona” ¿Cómo se concreta esto?
R. Considero que los que se dedican a esto no deben nunca alejarse de lo que te llevó a estar ahí, que es trabajar para las personas, yo no dejaré de hacerlo, estoy segura, porque entonces lo dejaré.
P. ¿Podrían ser, en este sentido, las mesas vecinales y temáticas de participación Ciudadana un instrumento útil?
R. Muy útil, necesario y serán convocadas por los propios vecinos cada vez que haga falta. No debemos interferir en el desarrollo de la participación ciudadana. Nunca. Debemos facilitar su cumplimiento. Que todas y todos los que viven aquí participen y se haga imprescindible su contribución al desarrollo de Tegueste.
P. Cada grupo político parte de un deseo bueno de hacer prosperar la Villa de Tegueste, de contribuir a ese bien común, pero cabe la posibilidad de olvidarse de la persona en sí misma, su necesidad concreta. La forma más “realista” de trabajar por el municipio es partiendo de las necesidades e inquietudes de la vecindad, teniendo en cuenta todo el movimiento social que existe y lo que se demanda. ¿Se puede terminar gobernando o haciendo oposición para defender una idea, y no a las personas? ¿Cómo evitar esta posible deriva?
R. En mi caso, llevo muchos años en un partido que trabaja para las personas, para sus necesidades básicas, para conseguir que desaparezcan las desigualdades, por eso no temo despegarme de la gente, de sus necesidades y de sus inquietudes. Se evita siendo lo que eres desde el principio.
P. La trama de relaciones que se dan en el pueblo puede ser una referencia a tener una mirada más realista. ¿cada persona del pueblo es un bien? ¿Qué me puede aportar personalmente?
R. Pues cada persona aporta su trabajo, su conocimiento, su sabiduría; todos somos un bien. Cuando hablo con alguien que me cuenta su situación personal o me cuenta historias de Tegueste, pongo los cinco sentidos, me enriquece.
P. La articulación de la Participación Ciudadana por “ley” puede ser positiva. Sin embargo, ya la sociedad teguestera tiene sus organizaciones que han nacido de las necesidades e inquietudes concretas, realidades que han nacido desde la sociedad civil, no desde las instituciones. Estas estructuras también tienen su carácter político, en el sentido amplio que hemos explicado anteriormente, de que son personas que se han unido por el bien común. Múltiples asociaciones o grupos de personas, como la de los empresarios Asevite, de los viticultores Avite, la deportiva de diversas índoles, de mujeres, culturales (carreteros, agrupaciones folckóricas, La Placeta, Aguavite, etc), religiosas (las diferentes parroquias, Cáritas), ONGs, también generan un tejido social comprometido. ¿Cómo favorecer este entramado de iniciativas que enriquecen la vida de nuestra sociedad?
R. De toda la vida han existido grupos organizados de cualquier índole que han colaborado activamente en todo lo referente a sus ámbitos, ahora, además, tenemos un reglamento que hará que todo ese trabajo de años, todo el saber, todas esas personas que conforman esos grupos podrán decidir activamente. Siempre han participado, ahora deciden.
P. ¿Puede existir la tentación de instrumentalizarlos o ningunearlos?
R. En nuestro caso no será así, estamos deseando poner en marcha la maquinaria participativa.
P. Hay una expresión de la sociedad más añeja por su riqueza identitaria, que es la tradición, todo lo que nos ha llegado de nuestros mayores. ¿Es un bien tener en cuenta esa herencia que se manifiesta de forma rica en nuestra Villa a través de expresiones culturales, folclóricas, religiosas y de relaciones humanas?
R. Somos, en parte, de donde venimos. A mí las tradiciones de cada lugar siempre me han cautivado. Tengo la suerte de vivir en un pueblo que se ha hecho así mismo, y todo lo que recuerde y reconozca esa larga historia me gusta. Y sobretodo ver como las teguesteras y teguesteros trabajan para conservar el acervo histórico, cultural, religioso.
P. En los últimos tiempos, se percibe a todos los niveles de la política cierto enfrentamiento, de modo permanente. Existe una polarización en la política donde el otro es considerado no un adversario, como habíamos aprendido en la transición, sino un enemigo. ¿Crees que la vida de la sociedad civil es más tranquila y es capaz de llegar a acuerdos? ¿Crees que es importante revertir esta percepción en la forma de hacer política?
R. Por supuesto que, en la vida real, diaria, no se perciben esos enfrentamientos. Creo que es fácil convivir y cuando aparecen diferencias, se habla, la palabra no duele, es mi forma de ver la vida.
P. ¿Tendrías alguna experiencia de cómo el diálogo y el acercamiento con algún miembro de otro partido haya sido enriquecedora?
R. Siempre enriquece, siempre hablas y negocias, llegas a acuerdos o no, pero siempre aprendes.