Proseguimos acercándole a cada candidato a la alcaldía, mediante una misma entrevista “En la política, tú eres un bien, eres lo único importante” realizada a cada uno de ellos, con la de este candidato llegamos a la última.

No queremos ir al detalle de las propuestas programáticas, ya que para ello hemos publicado el programa electoral. Queremos ir más a la persona, a su visión de la política y su relación con la sociedad.

Le presentamos a Francisco Javier Rodríguez de León, candidato a la Alcaldía del Ayuntamiento de Tegueste por el Unión Democrática de Tegueste.

P. Hoy en día, se mira con sospecha aquellos que dan el salto a presentarse a unas elecciones. A nosotros nos parece un paso valiente y que puede estar movido por un impulso de generosidad. ¿Por qué merece la pena dar este salto que en muchas ocasiones es ingratamente reconocido? ¿Qué inquietudes te mueven?

R. Llevo varios años vinculado a la política. He tenido periodos de representación institucional y otros cuya actividad ha sido menos visible. Creo que lo más gratificante es el contacto con los/as vecinos/as. Tener una escucha activa ya que en muchas ocasiones tienen la solución a sus demandas.

P. ¿Qué te sugiere la afirmación “la política es una persona, un miembro de la vecindad, un YO que se pone en movimiento en la búsqueda del bien común”?

R. En mi opinión cada uno de nosotros tiene una gran valía y esa inquietud por mejorar y sumar puede nacer desde la individualidad del yo y unirse a otros para un bien común y mayor.

P. “En el centro de la política debe estar siempre la persona” ¿Cómo se concreta esto?

R. La persona, el/la vecino/a debe ser el eje que mueva cualquier propuesta.

P. ¿Podrían ser, en este sentido, las mesas vecinales y temáticas de participación Ciudadana un instrumento útil?

R. La participación ciudadana es vital para la mejora del municipio. Estos encuentros o mesas son el vinculo que canaliza el sentir del colectivo.

P. Cada grupo político parte de un deseo bueno de hacer prosperar la Villa de Tegueste, de contribuir a ese bien común, pero cabe la posibilidad de olvidarse de la persona en sí misma, su necesidad concreta. La forma más “realista” de trabajar por el municipio es partiendo de las necesidades e inquietudes de la vecindad, teniendo en cuenta todo el movimiento social que existe y lo que se demanda. ¿Se puede terminar gobernando o haciendo oposición para defender una idea, y no a las personas? ¿Cómo evitar esta posible deriva?

R. En la formación que represento UDT, coexisten diferentes ideas y formas de abordar los problemas. Pero pese a lo que nos pueda diferenciar los unos de los otros siempre está en nuestra mente la persona, aunque indudablemente la idea de mejora beneficiara también al colectivo. No es fácil trabajar para el beneficio de un solo vecino sin perspectiva del bien común.

P. La trama de relaciones que se dan en el pueblo puede ser una referenciaa tener una mirada más realista. ¿cada persona del pueblo es un bien? ¿Qué me puede aportar personalmente?

R. Las propuestas que UDT lleva en su programa han partido de los diferentes encuentros informales que hemos tenido tanto con particulares como asociaciones, por lo que nos sentimos orgullosos de las aportaciones recibidas. Siempre suman.

P. La articulación de la Participación Ciudadana por “ley” puede ser positiva. Sin embargo, ya la sociedad teguestera tiene sus organizaciones que han nacido de las necesidades e inquietudes concretas,realidades que han nacido desde la sociedad civil, no desde las instituciones. Estas estructuras también tienen su carácter político, en el sentido amplio que hemos explicado anteriormente, de que son personas que se han unido por el bien común. Múltiples asociaciones o grupos de personas, como la de los empresarios Asevite, de los viticultores Avite, la deportiva de diversas índoles, de mujeres, culturales (carreteros, agrupaciones folckóricas, La Placeta, Aguavite, etc), religiosas (las diferentes parroquias, Cáritas), ONGs, también generan un tejido social comprometido. ¿Cómo favorecer este entramado de iniciativas que enriquecen la vida de nuestra sociedad?

R. Por un lado creo fundamental que mantengan su independencia, su idiosincrasia. La corporación debe ser un apoyo, pero en ningún caso influir en su propio movimiento y crecimiento.

P. ¿Puede existir la tentación de instrumentalizarlos o ningunearlos?

R. Puede existir la tentación de influenciar su actividad, pero la corporación como dije anteriormente no debe influir sino apoyar.

P. Hay una expresión de la sociedad más añeja por su riqueza identitaria, que es la tradición,todo lo que nos ha llegado de nuestros mayores. ¿Es un bien tener en cuenta esa herencia que se manifiesta de forma rica en nuestra Villa a través de expresiones culturales, folclóricas, religiosas y de relaciones humanas?

R. Si algo caracteriza al municipio es su riqueza cultural que hemos sabido mantener y salvaguardar. Debemos tenerla en cuenta mirando al futuro. Ambos pueden coexistir.

P. En los últimos tiempos, se percibe a todos los niveles de la política cierto enfrentamiento, de modo permanente. Existe una polarización en la política donde el otro es considerado no un adversario, como habíamos aprendido en la transición, sino un enemigo. ¿Crees que la vida de la sociedad civil es más tranquila y es capaz de llegar a acuerdos? ¿Crees que es importante revertir esta percepción en la forma de hacer política?

R. Pensar en el otro como un enemigo es un error. Todos somos personas capaces de caminar juntos y evitar esas situaciones de enfrentamiento. Al fin y al cabo, seguimos siendo vecinos los unos de los otros al margen de la política que es la circunstancia en un momento de nuestra vida.

P. ¿Tendrías alguna experiencia de cómo el diálogo y el acercamiento con algún miembro de otro partido haya sido enriquecedora?

R. Si, a lo largo de estos años he cultivado una gran amistad con componentes de otras fuerzas políticas manteniendo conversaciones e intercambiando ideas de cómo abordar los problemas que hemos podido detectar en el municipio sintiéndome satisfecho y orgulloso de esa relación que continua hoy en día.