Tegueste es un sinfín de sorpresas, de creatividad, de iniciativas. Les queremos presentar la primera cerveza artesanal comercializada hecha en Tegueste, Larrancadilla, de la mano de su creador Fernando Otamendi.
P: Fernando, siempre una aventura empresarial, como es esta cerveza, tiene una historia anterior que termina en la idea de crear algo, de emprender. ¿Cuéntanos como ha ido ‘fermentando’ esta idea con los años hasta que nació Larrancadilla?
R: Llevaba varios años haciendo cerveza “casera” en plan hobby. Empecé para probar y la verdad que es un mundo que engancha. Es increíble la cantidad de posibilidades que dan simplemente el agua, la malta de cebada, los lúpulos y la levadura. Por el camino aprendí mucho, de los materiales que podía conseguir por internet, de cursos, y sobre todo de los errores. Siempre fantaseé con la posibilidad de poder vender la cerveza hasta que un día me puse a echar números y di el paso.
P: “Larrancadilla” o “La arrancadilla” es una expresión muy canaria. Muy relacionada con los amigos y las parrandas. Para los que no la conozcan ¿puedes explicarnos un poco más qué significa, cuándo se utiliza esa expresión y por qué elegiste ese nombre?
R: Dice la sabiduría popular que los dioses pueden ser muy cabroncetes, especialmente a la hora de gestionar los deseos de los humanos. Es por eso que en Canarias, al menos, no se pide nunca la última copa, no sea que se lo tomen al pie de la letra y sea la última que te eches en tu vida. En su lugar se pide la arrancadilla. El problema es que como nunca es la última puedes acabar entrando en un bucle lógico de incalculables consecuencias… Se ha dado el caso de pedir Larrancadilla y acabar con churros y chocolate.
P: ¿Los primeros que probaron la cerveza, qué comentarios te hicieron? ¿qué te dijeron cuando les comentaste que querías lanzarte a esta aventura?
Que estaba loco… Pero luego pedían otra.
P: Ahora mismo estás produciendo dos cervezas distintas. Son las primeras cervezas artesanales para comercialización que se realizan en Tegueste, pero también has realizado la primera cerveza de Canarias y del mundo elaborada con miel de palma ¿podrías presentarnos cada una?
Tengo una rubia, de estilo American Pale Ale. 4,7% vol. de alcohol, de color claro con tonos rojizos, destaca el sabor y el aroma a lúpulos (Chinook, Cascade y East kent Golding), con tonos cítricos y a frutas tropicales. Se nota el sabor amargo pero creo que me ha quedado bastante bien balanceada con las maltas (Pale ale malt, cara hell y cara red).
La Palm Honey Ale es un invento a partir de recetas de honey ales, es decir cervezas con añadido de miel de abeja. Tenía ganas de hacer algo con ingredientes locales y me puse a investigar con la miel de palma. La proporción de azúcares fermentables es similar a la de la miel. Cuando digo que tengo una cerveza con miel de palma la pregunta siempre es si es dulce. La verdad es que no. La mayor parte de los azúcares de la miel de palma fermentan. Pero si actúa sobre el sabor. Aporta complejidad y los azúcares complejos que no puede procesar la levadura dejan un leve retrogusto, yo lo comparo al sabor que se queda después de comer alcachofas.
P: La cerveza es todo un mundo apasionante, habrás tenido que aprender mucho, te habrán sorprendido muchas cosas…
R: Nunca se acaba de aprender. Una pequeña fábrica de cerveza es un juguete increíble. En el proceso de elaboración actúas sobre muchas variables: ingredientes, temperaturas, tiempos… a su vez influyen unas sobre otras y las posibilidades son prácticamente infinitas. Lo importante es saber controlar cómo va a influir cada decisión que tomas en el producto final.
P: Y todo esto lo realizas en tu casa, artesanal 100%. ¿Montar todo este ‘tinglado’ ha sido complicado? Obras, financiación, permisos… cuéntanos un poco.
R: Pues sí. Tardé prácticamente un año en poner a la venta la primera botella. Hay que tratar con Ayuntamiento, Cabildo, Gobierno de Canarias y Gobierno de España. Urbanismo, Industria, Sanidad, Hacienda, Impuestos especiales… Es caro, largo y laborioso. Quiero aprovechar para agradecer la inestimable ayuda y apoyo que me prestaron desde el primer momento en Asevite. Y a los compañeros y compañeros de las cerveceras artesanas de Tenerife: Tacoa, Tierra de Perros y Chutney por sus buenos consejos ya asesoramiento en todo el proceso.
P: Para que nos hagamos una idea, ¿cuántas botellas estás produciendo mensualmente?
R: Hago dos lotes de unos 300l. En botellas 1800. La idea es poner otro fermentador para doblar la producción.
P: La cerveza se puede encontrar ya en muchos sitios de la isla, pero seguro que los inicios de la comercialización no fueron sencillos. Cuéntanos un poco.
R: Hay que hacer muchos kilómetros y hablar con mucha gente pero no fue tan difícil como esperaba. De hecho ha tenido muy buena acogida. Se nota el trabajo hecho con anterioridad por otras las otras cerveceras independientes.
P: En Tegueste, ¿dónde en dónde podemos tomarnos una cerveza de las tuyas? ¿y dónde podemos comprarla?
R: En los mejores locales: La cafetería del mercadillo del agricultor, Cervecería los Remedios, El Almirez, Tasca El colgadizo, Tasca Fernando, Restaurante Zenobio, Frutería La Limera, Tasca la Enredadera, Pizzería Te gusta. Creo que no me dejo ninguno.
P: Fuera de Tegueste, ¿en qué otros municipios se está comercializando también? ¿En otras islas?
R: Desde Garachico a Los Cristianos. Llevamos un par de meses trabajando con un distribuidor en Gran Canaria.
P: Seguro que te han surgido anécdotas respecto a la cerveza Larrancadilla, ¿alguna que recuerdes en especial?
R: He presentado la cerveza a mucha gente y las reacciones son muy diversas. Me llama mucho la atención un comentario que se repite mucho entre gente mayor: “sabe como las cervezas de antes”. Parece que las cervezas industriales han ido perdiendo sabor con los años. Interesante.
P: Nosotros, los redactores de InfoTegueste, queremos destacar siempre toda aquella iniciativa que nace de la creatividad y la implicación de las personas. Habrá habido momentos en que no se veía claro este proyecto, momentos de mucho trabajo, sacrificios. También mucha ilusión, alegría… ¿está mereciendo la pena dar un paso al frente y poner en marcha una pequeña empresa?
R: Si. Por ahora vamos cubriendo gastos con muchas dificultades pero espero que podamos pagar las deudas y empezar a respirar. Es mucho trabajo pero es el trabajo que me gusta, y no hay nada como terminar la jornada y tomarte la mejor cerveza del mundo, que es la que haces como a ti te gusta.
Fernando, agradecerte esta iniciativa, la valentía de lanzarte hacia una idea, y el que nos la hayas presentado dedicándonos este tiempo para mostrarnos el proyecto. Invitar a nuestros seguidores a probar esta cerveza hecha en la villa, difundiéndola entre los amigos y conocidos. Se acercan las navidades, momento de celebraciones ideales para una buena cerveza artesanal Larrancadilla. ¡Salud!