Proseguimos acercándole a cada candidato a la alcaldía, mediante una misma entrevista “En la política, tú eres un bien, eres lo único importante” realizada a cada uno de ellos, que iremos publicando por orden alfabético del nombre del partido.
No queremos ir al detalle de las propuestas programáticas, ya que para ello hemos publicado el programa electoral. Queremos ir más a la persona, a su visión de la política y su relación con la sociedad.
Le presentamos a Ricardo Chico Marrero, candidato a la Alcaldía del Ayuntamiento de Tegueste por Unidas Podemos
P. Hoy en día, se mira con sospecha aquellos que dan el salto a presentarse a unas elecciones. A nosotros nos parece un paso valiente y que puede estar movido por un impulso de generosidad. ¿Por qué merece la pena dar este salto que en muchas ocasiones es ingratamente reconocido? ¿Qué inquietudes te mueven?
R. Desde siempre me ha preocupado el bien común, el servicio a los demás y que los ciudadanos tengan una vida digna con sus derechos reconocidos, que uno dedique una pequeña parte de su vida a trabajar por los demás, por la conservación del planeta, y por todo aquello que nos pueda hacer más felices y solidarios creo que está por bien empleado hasta sin sueldo, además hacer política supone: dividir, mandar, diferenciarse, en muchos casos, da lugar a la corrupción. Nosotros para evitarlo promovemos, la participación de la ciudadanía y su decisión
P. ¿Qué te sugiere la afirmación “la política es una persona, un miembro de la vecindad, un YO que se pone en movimiento en la búsqueda del bien común”?
R. Creo que la política es eso y mucho más, también es conseguir que la distribución de la riqueza llegue a todos los ciudadanos, que la especulación y el fraude no tengan cabida en una sociedad igualitaria, que el tiempo que uno dedique a la política tiene que ser temporal, etc.
P. “En el centro de la política debe estar siempre la persona” ¿Cómo se concreta esto?
R. La persona es la parte más importante de la sociedad, para esto los políticos trabajamos, para que sus inquietudes tengan soluciones, para facilitarles todos los aspectos que desde la gestión de lo público puede hacerle más cómoda su día a día, no hay nada más gratificante que desde lo público se puedan resolver problemas de la gente. Se trata de no solo de facilitar las libertades y derechos individuales, sino de garantizar a todas y todos los derechos básicos: salud, educación, vivienda, trabajo, protección ante el infortunio, etc
P. ¿Podrían ser, en este sentido, las mesas vecinales y temáticas de participación Ciudadana un instrumento útil?
R. Todo lo que sea participación ciudadana es imprescindible para que los ciudadanos aporten y hagan llegar a los gestores de las administraciones sus inquietudes y necesidades, ahora bien, esta participación debe ser de auténtica y sin ningún tipo de control de la información por parte de la administración, se trata de cumplir la función de control de la actividad de los representantes públicos, si no puede ser un paripé.
P. Cada grupo político parte de un deseo bueno de hacer prosperar la Villa de Tegueste, de contribuir a ese bien común, pero cabe la posibilidad de olvidarse de la persona en sí misma, su necesidad concreta. La forma más “realista” de trabajar por el municipio es partiendo de las necesidades e inquietudes de la vecindad, teniendo en cuenta todo el movimiento social que existe y lo que se demanda. ¿Se puede terminar gobernando o haciendo oposición para defender una idea, y no a las personas? ¿Cómo evitar esta posible deriva?
R. Las ideas, son parte de los programas políticos, estos se debe hacer con la participación de los ciudadanos, por tanto las ideas es lo fundamental para la consecución de los anhelos de los individuos y la sociedad, otra cosa distinta es que cada opción política tiene su ideario y su programa, cada grupo representa una forma de concebir la sociedad y representan intereses específicos: unos son partidarios de la redistribución de la riqueza, otros de bajar impuestos, por eso precisamente hay opciones políticas diferentes.
P. La trama de relaciones que se dan en el pueblo puede ser una referencia tener una mirada más realista. ¿cada persona del pueblo es un bien? ¿Qué me puede aportar personalmente?
R. Todas las personas aportan, unas son más solidarias y otras más individualistas, es verdad que, en un municipio pequeño como Tegueste, las personas se conocen más y se relacionan más fácil, y es importante para un político llegar y conocer los problemas de la gente, estos son más fácil en cuanto haya una relación más estrecha, por el contrario esto no puede servir para favorecer a unos en perjuicio de otros, ahí se debe establecer unos límites bien claros. Nosotros, en cualquier caso, tomando en consideración la desigualdad de situaciones; edad, vivienda, renta, patrimonio, buscamos la redistribución de los recursos en beneficio de todos.
P. La articulación de la Participación Ciudadana por “ley” puede ser positiva. Sin embargo, ya la sociedad teguestera tiene sus organizaciones que han nacido de las necesidades e inquietudes concretas, realidades que han nacido desde la sociedad civil, no desde las instituciones. Estas estructuras también tienen su carácter político, en el sentido amplio que hemos explicado anteriormente, de que son personas que se han unido por el bien común. Múltiples asociaciones o grupos de personas, como la de los empresarios Asevite, de los viticultores Avite, la deportiva de diversas índoles, de mujeres, culturales (carreteros, agrupaciones folclóricas, La Placeta, Aguavite, etc), religiosas (las diferentes parroquias, Cáritas), ONGs, también generan un tejido social comprometido. ¿Cómo favorecer este entramado de iniciativas que enriquecen la vida de nuestra sociedad?
R. Desde nuestro punto de vista, hay que escuchar siempre a todas las asociaciones, organizaciones, Ong`s etc, y respetando la idiosincrasia de cada una, apoyar siempre a las que hacen una labor en atención a los más necesitados, difundan valores de solidaridad, de defensas de los derechos de la mujer, de protección del medio y potenciciación de las energías alternativas, es decir todo aquello que sume para el bien general. Dentro del respeto a los derechos de los grupos, lo común ha de ajustarse a los derechos y libertades reconocidas y a la declaración universal de los derechos humanos.
P. ¿Puede existir la tentación de instrumentalizarlos o ningunearlos?
R. Creo que se debe ser claro desde el principio, un gobierno es consecuencia de un programa político, al que se debe y por respeto a los ciudadanos que te han apoyado hay que ser consecuente siempre, pero no solo existe la tentación, sino que es frecuente la conexión, para evitarla, se debe hacer un control público de la acción institucional, de los presupuestos, de los gastos, etc.
P. Hay una expresión de la sociedad más añeja por su riqueza identitaria, que es la tradición, todo lo que nos ha llegado de nuestros mayores. ¿Es un bien tener en cuenta esa herencia que se manifiesta de forma rica en nuestra Villa a través de expresiones culturales, folclóricas, religiosas y de relaciones humanas?
R. Efectivamente el acervo de las tradiciones populares es lo que somos actualmente y es un bien a conservar, ciertas fiestas en todo el territorio nacional, tienden a masificarse por estrategias que no tienen que ver con las tradiciones, esto conlleva aparte de problemas de conciliación con personas que nos son tan festivas, y una pérdida de identidad de la propia expresión cultural, hay que buscar un término que no perjudique y que no transmute la verdadera expresión y sentido de la fiesta. En cualquier caso, el respeto a opciones individuales o colectivas no puede imponerse sobre los derechos y libertades de todos. Es necesario respetar la libertad religiosa a la vez que la laicidad de las instituciones públicas.
P. En los últimos tiempos, se percibe a todos los niveles de la política cierto enfrentamiento, de modo permanente. Existe una polarización en la política donde el otro es considerado no un adversario, como habíamos aprendido en la transición, sino un enemigo. ¿Crees que la vida de la sociedad civil es más tranquila y es capaz de llegar a acuerdos? ¿Crees que es importante revertir esta percepción en la forma de hacer política?
R. Como dije anteriormente, lo más importante son los programas, hay formaciones con las que te puedes entender más fácilmente porque tienen partes de los programas que concuerdan con los tuyos, y en otras es más difícil de acordar, pero siempre va a primar el bien general, y el diálogo. En la situación de crisis económica, las minorías económicamente dominantes pretenden beneficiarse a costa de la clase trabajadora, de ahí la crispación.
P. ¿Tendrías alguna experiencia de cómo el diálogo y el acercamiento con algún miembro de otro partido haya sido enriquecedora?
R. Si siempre hay alguna cosa en la que te puedes entender.